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miércoles, 11 de mayo de 2011

GUILLERMO MAZÓN

UN SUSTO EN EL HOTEL

Solo pude mirar hacia atrás cuando el hotel en el que me encontraba se incendió, yo estaba corriendo por el pasillo con el fin de salir del hotel. Todo empezó por culpa de que el hombre que se alojaba en la habitación de al lado, se había dejado la chimenea encendida durante la noche, y sobre las dos de la mañana se despertó, dándose cuenta de que su manta se había caído en la chimenea y se había incendiado.
Tras el susto, el hombre avisó a los bomberos y todos los que dormíamos en el hotel tuvimos que salir de él. Finalmente y por suerte para los que pasábamos un tiempo ahí todo acabó en un susto, debido a que los bomberos consiguieron apagar el incendio.

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